Escrito: Obras Maestras

Eres una obra maestra. En mis sueños, con frecuencia.
Ni siquiera se tu nombre, pero te he visto a los ojos.
Innumerables veces me has hablado, sin decir una palabra.

¿Eres musa? ¿eres una antorcha en la oscuridad, tal vez?
Se tantas cosas que eres, y te conozco desde hace años, pero prosigo incapaz de darte nombre.



Eres aquel sentimiento que me recorre cada vez que creo una obra magnifica. No porque sea perfecta, sino porque es mía y, aunque llegue el día en que le observe apenada (e incluso decepcionada) con los ojos de la crítica, al verla con el corazón siempre estaré orgullosa de ella, de mi y de mi sentir.

Eres un ser tan ambiguo y tan especial, indescifrable por momentos (la mayoría de ellos). Pero también me gusta creer que me entiendes y te entiendo. Como ese cosquilleo que se siente en el estomago con lo que llaman "un amor a primera vista", cuando no sabes lo que es (de hecho, no tienes la menor idea), pero tienes aquella certeza de que podría ser algo grandioso.

Eres un mundo por descubrir, pareces nunca acabar. Y sigue en mi esa necesidad de recorrerte por completo al tiempo que ruego por que no acabes nunca.

Insisto. No se que eres, tal vez nunca este segura. Pero se que te adoro.

Por favor, nunca me abandones.